Con una jornada cargada de historia, emoción y orgullo comunitario, el paraje San José celebró los 100 años de la Escuela N° 414 “Alfea Navarro de Nittinger”, institución que ha sido faro de educación, valores y contención para generaciones de familias del interior santiagueño.

El acto protocolar reunió a autoridades provinciales, municipales, ex docentes, ex alumnos, vecinos y representantes de distintas instituciones educativas de la región. Se vivió un momento profundamente emotivo con el descubrimiento de placas conmemorativas, tanto por parte de la familia Nittinger como de ex alumnos y de la Comisión Municipal, en homenaje a la historia y al legado de la escuela.

El director de la institución, Prof. Navor Jiménez, repasó con emoción la trayectoria de la escuela y agradeció especialmente al Comisionado de Garza Marcos Tenaglia por su acompañamiento constante y su compromiso con la educación rural. A su vez, el comisionado destacó “la unión y el esfuerzo de los vecinos de los distintos parajes que, más allá de las distancias, trabajaron codo a codo para que esta celebración sea posible y tan sentida como se merece esta querida escuela”.

Durante la ceremonia, Tenaglia hizo entrega de un Smart TV de 43”, obsequio institucional de la ministra de Educación, Dra. Mariela Nassif, a quien agradeció públicamente, al igual que a la presidenta del Consejo General de Educación, Dra. María Elena Herrera, y al gobernador Dr. Gerardo Zamora por su respaldo permanente al desarrollo de la educación en el interior.

Se compartió un almuerzo en comunidad y luego disfrutaron de la presentación de la Academia Municipal “Identidad Garceña”, además ex alumnos y alumnos ofrecieron una representación artística cargada de identidad y emoción.

El evento fue conducido con calidez, profesionalismo y emotividad por Silvia Campos y Cristian Sánchez, quienes aportaron un brillo especial a esta jornada inolvidable.

Por la noche, la comunidad vivió una verdadera fiesta popular con shows en vivo de Yera Campos, Kike Loto, Marcelo Farías y un cierre a todo chamamé con el grupo La Ranchada, que puso a bailar a vecinos y visitantes bajo las estrellas.

El centenario de la Escuela N° 414 fue mucho más que una celebración: fue el reencuentro con la memoria, la reafirmación de los vínculos comunitarios y un fuerte mensaje de esperanza hacia el futuro.









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