Fernández | 04-07-2017

Productores solicitan medidas para evitar el ingreso de cebolla desde Brasil



En la presente campaña se estima que se producirán unas 75 mil toneladas de cebolla cuyo valor se ve gravemente afectado por la importación desde Brasil y en consecuencia la destrucción de la fuente laboral de unos 92 mil jornaleros.



Según datos aportados desde el Centro de Comercio y Producción de Fernández (CeCIPAF), en la región de riego, se sembraron unas 4000 (cuatro mil) hectáreas de cebolla en la presente campaña, destinadas al consumo interno nacional, lo cual multiplicado al rendimiento obtenido, se traduce en un total de 3.000.000 de bolsas y un volumen de 75.000 toneladas para lo cual se emplean en los trabajos de recolección a razón de 23 jornales por hectáreas, lo que equivale a un valor aproximado de 92.000 jornales.

Desde la institución, sostienen que las reglas de mercado y los valores que rigen, intervienen directamente sobre la economía de los hogares de los pequeños productores de la zona y de las familias que dependen del trabajo de limpieza, recolección y demás actividades que se relacionan en forma directa o indirecta, conformando las condiciones de vida y el desarrollo económico.

“La participación del mercado internacional, más precisamente cebolla de procedencia brasilera, que favorecidas por el cambio, intervienen en forma negativa causando un grave perjuicio para gran parte de las familias santiagueñas y de otras partes del país, ya que ponen a nuestros productores en competencias imposibles de afrontar debido a los costos de producción y las cargas impositivas que impiden la rentabilidad y producen un alto grado de desempleo” señala el petitorio presentado por el CeCIPAF ante la CAME.

Ante esta situación desde la organización solicitaron ante el presidente de Economías Regionales de la CAME Raúl Robín, gestione ante quien corresponda a fin de lograr barreras de protección de la producción local, impidiendo el ingreso desmedido y perjudicial de producción de cebolla brasilera en Argentina.

“Estas actividades, crean trabajo genuino y desarrollo económico de muchos pueblos de esta zona de riego santiagueño, activando el engranaje que interviene en la comunidad como motor de desarrollo por las cuales otras actividades también logran movimiento como el comercio y la construcción”.

“Impide también el desarraigo y podemos mencionar en este sentido un gran número de comprovincianos que al no encontrar condiciones favorables se trasladan a los centros poblados para engrosar villas de emergencia siendo un problema mayor al estado que debe asistir y la consecuente falencias que se perciben producto de la escasa posibilidad de desarrollo en esos ámbitos” reza el documento presentado.




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